Uno de los primeros rostros amables que recibe a los visitantes en el Establecimiento Penitenciario de Mediana Seguridad y Carcelario de Armenia (Quindío) es el de Nelson Mandela¹. Esta imagen, inmortalizada en un imponente mural a la entrada, da la bienvenida y simboliza la significativa transformación y humanización que se está llevando a cabo al interior de este lugar.

La Cónsul y 'Guardiana' de los Derechos Humanos del Establecimiento, Dragoneante Kelly Milena Pinto, ha convertido su labor en una misión entusiasta y apasionada, contagiando a todos a su alrededor con el compromiso de que conozcan, respeten, defiendan y exijan el cumplimiento de las reglas Mandela.

Estas, se basan en ser lineamientos para el tratamiento de las personas privadas de la libertad -PPL-, han sido fuente de inspiración para la Dragoneante, que las mantiene disponibles en cuadernillos argollados y las ha plasmado en las paredes al interior de los pabellones de reclusión. Lideró junto con auxiliares del Cuerpo de Custodia y Vigilancia, la realización del mural del líder sudafricano², obra que se ha convertido en un punto de referencia para los transeúntes y visitantes, que a menudo se toman fotografías frente a la fachada de la cárcel.

Dar a conocer estas reglas en el contexto penitenciario es fundamental, ya que proporcionan directrices para proteger los derechos de las personas privadas de libertad, a la vez, que los capacita para exigir el cumplimiento en su propia defensa, prácticas que irán implantando una manera diferente de pensar hasta que se conviertan en una nueva cultura que promueva los derechos humanos.

Al interior de este centro de reclusión está pasando algo transformador, se siente en la cordialidad de todos los servidores penitenciarios que allí laboran; se ve en cada una de las personas privadas de libertad que aportan con su mano de obra al embellecimiento del lugar y en el semblante de quienes están en los talleres o en las aulas de clase realizando sus actividades con pasión y entusiasmo. Se escucha en las frases de aprobación y respeto con expresiones como: “los guardianes son magníficas personas, nos escuchan, nos aconsejan y nos alientan…”; y en la voz de los funcionarios cuando dicen: “esta persona privada de la libertad es como un compañero que aporta con su trabajo a mejorar el establecimiento”.

Muchos conocemos la metáfora "aunque la jaula sea de oro, no deja de ser prisión", pero concientizar a los penados y a los funcionarios sobre cómo un trato respetuoso mejora de la calidad de vida y el ambiente dentro de los establecimientos carcelarios es primordial para su Director, doctor Jorge Iván Osorio, quien comenta: "las frecuentes riñas en los pasillos y pabellones son ahora casi un mal recuerdo, porque un pequeño cambio, marca una gran diferencia".

Los servidores penitenciarios deben conocer y aplicar estas reglas, no solo como parte de su compromiso con la Institución, sino como un valor que fomenta el desarrollo de cada persona, hacia la mejora del ser humano.

La dragoneante Pinto en uno de los patios, compartiendo con una persona privada de la libertad.

Cuadernillos disponibles para las PPL en los patios de reclusión.

Dragoneante Kelly Milena Pinto, frente al mural.

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¹Nelson Mandela, político, abogado, activista y líder democrático, conocido por el nombre de su clan, Madiba, hombre con grandes cualidades y valores, fue presidente en su país Sudáfrica, entre los años 1994 y 1999, siendo el primer presidente de raza negra en ganar unas elecciones libres, murió en año 2013 a sus 95 años.

²Acciones realizadas con el apoyo y donaciones de personas de la comunidad que empatizan con estas causas.